Jeffery Deaver sumerge al lector en una trama policíaca excelente.
Lincoln Rhyme es un antiguo detective que, tras quedarse paralítico en un accidente
laboral y volver al trabajo desde su mente inmensamente activa en un cuerpo que
no responde, busca con denuedo al Bailarín
de la Muerte, asesino a sueldo con el que tiene cuentas personales pendientes.
En esta labor le ayuda la joven detective Amelia Sachs, con la que se percibe
la tensión sexual existente entre ambos colaboradores.
El asesino ha sido esta vez contratado para acabar con la vida de
tres personas: un matrimonio de aviadores y su socio, todos ellos testigos en
un juicio contra un criminal. La labor de los detectives será, a la vez que
atrapar al Bailarín, proteger a estos testigos. Pero el Bailarín es muy listo,
y tanto Lincoln como Amelia tratarán de meterse en su mente para imaginar y
prever cuales serán sus pasos.
Una novela trepidante, con muchos momentos de tensión y un final
sorprendente. Thriller policíaco de los buenos.
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