martes, 12 de agosto de 2014

La interpretadora de sueños


Una joven judía vive en Praga en el período de entreguerras, con un hijo póstumo fruto de su breve matrimonio que acabó durante el naufragio del Titanic. Su familia política no la acepta y considera que el matrimonio, celebrado a bordo del barco, no es válido. Sus amistades son escritores y poetas que con el tiempo se harán un nombre, pero su vida es cada vez más complicada, en un período de auge del antisemitismo.
Además, la joven Sarah Georginas interpreta sueños, y además, los interpreta bien. Cuando su vida en la Europa inmediatamente anterior a la Segunda Guerra Mundial se complica, emigra con su hijo a Estados Unidos. Con ayuda de algunas amistades, pondrá en marcha un Gabinete de Interpretación de Sueños y se convertirá en una mujer rica. Pero no contenta con su suerte, volverá a Europa en plena guerra con el fin de ayudar a su raza, confiando en su pasaporte estadounidense, que no le impedirá ser detenida y pasar un año en un campo de concentración.

Esperaba más de esta novela, que en muchas ocasiones se antoja irreal y absolutamente increíble. Por poco creíble, no por maravillosa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario