Walter Isaacson es un escritor y biógrafo estadounidense famoso,
entre otras cosas, por haber escrito una biografía de Einstein o de Kissinger. Cuando
Jobs le llamó para pedirle que escribiera su biografía, Isaacson no comprendió
la urgencia del asunto, pues Steve Jobs parecía encontrarse bien, al margen de
sus anteriores problemas de salud. Pero Jobs, como él bien sabía, tenía un
tiempo muy limitado para crear todo lo que él quería crear y para dejar un
legado para la historia.
La biografía se basa en aproximadamente cuarenta entrevistas que
el escritor mantuvo con Jobs, junto con muchas otras realizadas a familiares,
trabajadores, socios, amigos y enemigos. El resultado es una amplia visión de
la vida de Jobs, sobre todo de la profesional, y los éxitos y fracasos de sus
creaciones, desde la fundación de Apple hasta la presentación del iPad, su último
juguete. También el lector puede acercarse al carácter irascible de Steve Jobs,
su prepotencia, su falta de empatía, su crueldad con sus subordinados. Y aún así,
su capacidad para, bajo presión, sacar lo mejor de ellos y conseguir lo que
consiguió. Como decía Apple, 1997:
“Por los locos, los inadaptados, los
rebeldes, los agitadores, las clavijas redondas
en los orificios cuadrados, los que ven las cosas de manera distinta. No sienten apego por las reglas, ni
respetan el estado de cosas. Puedes
citarlos, disentir, glorificarlos o difamarlos. Lo único que no puedes hacer es ignorarlos, pues son los que
producen cambios. Permiten el avance de la humanidad y, aunque algunos los consideran
delirante, nosotros vemos genios porque
las personas lo bastante alocadas para pensar
que pueden cambiar el mundo son las que lo cambian”.