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miércoles, 8 de mayo de 2019

Mil cosas que no te dije antes de perderte



El título de este libro me encandiló, sentí curiosidad y me puse con él. Ya había leído un par de novelas de Benito Olmo, pero esta, que es anterior, no tiene nada que ver con ellas. Es una novela íntima, aunque mantiene la tensión con un par de asuntos de índole criminal.
David es un joven granadino (o granaíno, como diría él), que reside en Madrid desde hace varios años, y apenas mantiene relación con su familia. Tuvo desavenencias con su padre y desde entonces ya no se siente cómodo en su ciudad. Cuando un día su madre le llama para comunicarle que su padre ha fallecido de un infarto, se dirige inmediatamente a Granada y empieza a lamentar no haber mantenido un mayor contacto con él.
Pero cuando llega se da cuenta de que hay cosas en la muerte de su padre que no encajan, como por ejemplo el lugar del fallecimiento, que no es otro que la casa familiar de sus abuelos, donde poco a poco se va enterando de que su padre pasaba mucho tiempo. También descubre que la empresa familiar ha pasado a manos de su hermano, con quien siempre mantuvo una buena relación y que ahora le parece un extraño, sobre todo por la actitud que tendrá al saber que David ha heredado la casa de los abuelos.
David se instala allí, y un día aparece en su casa Alicia, una joven frágil a la vez que fuerte, una joven que fue amiga de su padre y en la que no podrá dejar de pensar, hasta el punto de enamorarse.
Pero la historia con su hermano no ha terminado, y a David le va llegando información sobre su papel en la decadencia y muerte de su padre, cosa que David no podrá perdonar.
En conjunto, una excelente novela, bien hilada y donde la historia acaba de una manera completa.

jueves, 7 de febrero de 2019

La tragedia del girasol


Vuelve Benito Olmo a tenerme pegada a un libro hasta que consigo terminarlo. Y vuelve el antipático y metomentodo Manuel Bianquetti a sumergirse en una historia que, sin comerlo ni beberlo, está a punto de acabar con su vida y con alguna más.
Bianquetti está suspendido de empleo y sueldo tras la aventura que transcurre en la novela anterior, La maniobra de la tortuga. Pero se ha quedado en Cádiz y está malviviendo como puede, trabajando como investigador privado sin apenas encargos. El único que tiene entre manos es el de encontrar a una joven prostituta llamada Regina, por encargo de no sabemos muy bien quién.
Cuando le surge la posibilidad de formar parte de la seguridad de un empresario que va a permanecer unos días en Cádiz, decide probar, siendo un trabajo bien pagado. Pero todo se complica cuando atentan contra el hombre al que tiene que proteger, durante un partido Cádiz-Real Madrid.
La cosa podría haberse quedado ahí, pero Bianquetti no se conforma con lo que parece, ya lo conocemos, y cuantas más veces le indican que se aparte, más veces que corre a meterse en la boca del lobo…

lunes, 4 de febrero de 2019

La maniobra de la tortuga



He tardado veinticuatro horas escasas en acabar con este libro. Me ha enganchado totalmente. Ahí tenemos a Manuel Bianquetti, un policía del que sospechamos desde el principio que tiene un pasado muy triste, malviviendo en una comisaría de Cádiz, sin gran cosa que hacer. Pero cuando una adolescente de dieciséis años aparece muerta, y todas las sospechas recaen sobre el novio de la joven, nuestro inspector (que ya mismo se convertirá en mi favorito) no cree lo que parece obvio.
Sin permiso, e incluso contraviniendo órdenes, se dedicará a investigar el crimen. Según van pasando las horas (pues el relato dura apenas un fin de semana) la cosa se va complicando, y el inspector va confirmando sus intuiciones. Pero Bianquetti, habilidades sociales no tiene muchas, su aspecto tampoco acompaña, y lo que no sabemos es cómo puede acabar toda esta sórdida historia.
Una pequeña maravilla de la novela negra actual. Y transcurre en Cádiz. ¿Qué más se puede pedir?