No tenía nada que me
motivara para leer y hoy he leído una novela para adolescentes (una vez más). En
esta ocasión, la historia comienza con un chiste. Un chiste que un amigo le
cuenta a Mario, protagonista adolescente de esta historia. El chiste es de un
gusto dudoso, se refiere al profesor de Lengua y Literatura, y tiene la mala
suerte de ser escuchado por el director del instituto mientras se lo está
contando a Sofía, la chica que le gusta y de la que no es más que un buen
amigo.
A partir de aquí,
casi todo comienza a enredarse. Agresiones, intrigas y, sobre todo, la muerte
del profesor. Con ayuda de Sofía, intentará desenmarañar el misterio y
descubrir qué está pasando, qué relación tiene con el chiste, y, sobre todo, si
es posible morir de un ataque de risa.