jueves, 8 de septiembre de 2016

El retrato de Dorian Grey


El retrato de Dorian Grey es, como muchos de los relatos que escribió ese mago de la narración que fue Oscar Wilde, un descenso a los infiernos.
Dorian Grey es un joven de belleza deslumbrante, que vive en la sociedad londinense. Un pintor se encandila con su figura y pinta un retrato de él que hace honor a su maravilloso físico. De alguna manera, el deseo de Dorian de conservarse siempre tal y como aparece en el cuadro, parece tener respuesta.
Dorian se enamora de su figura, del placer y el vicio, y se inserta en una vida nada edificante, llevando al barro a muchos y muchas jóvenes que lo adoran por su aspecto deslumbrante, que no cambia con el paso de los años. Quien sí cambia es el retrato, que, escondido en una sala de su casa, va mostrando en su rostro y su figura la degradación y los vicios que le acompañan.
Cuando el pintor, antiguo amigo de Dorian, irrumpe de nuevo en su vida, todo se acelera. Dorian lo asesina y de ahí al final sólo podemos asistir a la inmersión en la locura de un joven que se perdió por ser bello.




No hay comentarios:

Publicar un comentario