Agatha Christie en estado puro. Una novela clásica
en el género. Clásica en el sentido de estar protagonizada por el clásico
Poirot, quien va destejiendo los hilos de la trama para, finalmente dar con el
culpable.
Lord Edgware ha sido asesinado, y la primera
sospechosa es su esposa, quien quería verse libre de él. Pero también se verán
beneficiados con su muerte su heredero, así como su hija. Tras la muerte,
considerada por la policía como accidental, pero por Poirot como asesinato, de otra
actriz que había suplantado durante la noche del crimen a la esposa, Poirot
comprende que el crimen es mucho más elaborado de lo que parece. Tirando de
todos los hilos, finalmente esclarecerá la verdad, usando, como siempre, sus
dotes deductivas.
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