Que el tiempo nos encuentre

Este excelente relato va y viene en el tiempo desde los tiempos de principio de siglo en una España rural y caciquil, donde surgen las pasiones entre miembros de clases opuestas, hasta el México de la II Guerra Mundial, donde se dieron cita, quizá por casualidad (quizá era el destino) grandes maestros del cine.

Teresa Viejo borda el retrato de Aurora, la heroína de la historia, totalmente creíble. Desde su niñez como pueblerina con el trasfondo de la muerte de sus padres, trauma infantil nunca superado, su cariño hacia la familia que la acoge como niñera tras su orfandad, su adolescencia con la guerra civil como decorado y su huida en compañía de la familia hacia ese México que la seducirá con sus colores y sus olores, tan diferentes de los grises y negros de una España triste y oscura.

Pero no es el único excelente personaje creado por la autora. Edwina, la misteriosa amiga alemana de Aurora; Pablo, el novio egoísta; Hugo, su dependiente jefe y hermano; Berta, la esposa de Hugo, quien la salvó de su suerte… Incluyendo también a personajes reales, que vivieron esa época en ese lugar que fue el México de los años 40.

Un libro para disfrutarlo.