Un adolescente de diecisiete años queda
huérfano en Ciudad de México. Pero no solo queda huérfano de padre y madre
simultáneamente (en un accidente de tráfico, quizá suicidio conjunto) sino que previamente
había quedado huérfano de abuela y, sobre todo, huérfano de hermano mayor. Su
hermano, Carlos, fue asesinado hace tres años y él aún quiere vengarse, y la
sucesión de muertes en su casa lo único que ha hecho ha sido afianzarle en su decisión.
¿Se ha convertido en un salvaje? Quizá. Y quizá todo tenga que ver con la
mascota que ha adoptado últimamente, Colmillo, un perro lobo que finalmente
resultó ser simplemente un lobo.
A la par, leemos una historia que transcurre
en Canadá, en una zona boscosa y asalvajada donde un hombre lucha por cazar a
un lobo con el que se ha obsesionado. ¿Hay alguna relación entre ambas historias?
Habrá que terminar el libro para saberlo…
Excelente historia contada de manera peculiar,
entrelazando pasado, presente y futuro, llena de personajes entrañables. Muy
buena lectura.
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