La historia de amor entre Costanza y Mauro es
bastante increíble. Amigos de la infancia, novios adolescentes, dejaron pasar
por diversas circunstancias su oportunidad. Mauro ingresó en el clero y hoy es
un sacerdote con una trayectoria pasada y futura bastante halagüeña. Costanza
es una abogada de prestigio, primero fue fiscal y lo dejó para entrar en un
despacho especializado en delitos económicos. Divorciada y madre de una niña
que murió accidentalmente, hace años que no confía en volver a encontrar el
amor.
Pero la casualidad, o el destino, hace que
Mauro y Costanza se encuentren en la calle al poco tiempo de volver Mauro de
Roma. Esto generará tanto en uno como en otra una serie de pensamientos y
deseos que no puede acabar más que de una manera… Pero los remordimientos y las
dudas de Mauro serán quienes siembren la incertidumbre.
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