El inspector Sejer investiga dos asesinatos que parecen estar
relacionados, sobre todo por haber sido cometidos con apenas días de diferencia
en una pequeña ciudad donde no suele haber crímenes. En primer lugar, Maja, una
atractiva prostituta ha sido hallada muerta, asfixiada, en su propia cama. Unos
días después se produce la desaparición de un padre de familia que aparece en
el río unos meses después, asesinado a puñaladas.
Las pesquisas pasan por Eva, una pintora que apenas vende, con
grandes problemas económicos, amiga de la infancia de Maja y recientemente
reencontrada con ella. El inspector sospecha que hay algo extraño en su
actitud, pero no acaba de comprender la situación, hasta que finalmente Eva no
pueda más y acabe contando la historia…
Novela negra nórdica muy bien hilada, con personajes absolutamente
creíbles, tanto el inspector como Eva o sus allegados. No se trata de novela
exclusivamente de crímenes, sino que describe con precisión la vida y los
pensamientos de los protagonistas. Rápida y ágil de leer, buena lectura sin
lugar a dudas. Volveré a Karin Fossum.