domingo, 28 de agosto de 2016

El espejo se rajó de parte a parte


Agatha Christie ocupa, con razón, un lugar esencial en la novela de crímenes. De vez en cuando, si cae en mis manos alguna de sus novelas, la devoro en pocas horas. Me ha ocurrido en esta ocasión con esta.
En una mansión victoriana cercana al pequeño pueblo donde reside la señorita Marple (anciana inteligentísima y conocedora de la naturaleza humana), se produce un crimen por envenenamiento. Todo parece indicar que la asesinada lo ha sido por error, y que debería haber muerto una actriz de cine muy famosa, que organizaba la recepción donde todo sucedió.

Se suceden crímenes a continuación, encontrándose las víctimas entre el servicio que aquél día allí se encontraba, y la señorita Marple tendrá que recurrir a sus dotes de deducción para, sin ningún género de duda, comprender qué ha ocurrido y qué está ocurriendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario