Tarde o temprano, siempre acabo de nuevo con Agatha Christie. Me
encanta la novela negra, de crímenes, y ella es una auténtica artista del género.
Siempre con ese aire antiguo, por supuesto, dejando sólo entrever todo lo que
tenga aspectos escabrosos, como una señora escribiendo sobre asesinatos debe
hacer, y no incidiendo en detalles obscenos.
En esta ocasión, un caballero y su hermana se instalan en un
pequeño pueblecito con el fin de que éste se reponga de una lesión. Allí confían
en vivir con tranquilidad, pero pronto se ven inmersos en la sociedad local, sociedad
rural a la que están llegando últimamente una serie de anónimos. Varias
personas han recibido cartas haciendo referencia a relaciones ilegítimas o
deseos poco apropiados.
Cuando uno de los anónimos desemboca en un suicidio, y poco después
se produce el asesinato de una joven criada de la suicida, aparece la señorita
Marple en escena con el fin de averiguar lo que ha ocurrido. ¿Lo descubrirá?
¿Acaso podemos dudarlo?
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